Un error común en muchos jugadores es la suposición de que el boliche es un juego físico en gran medida y en todos los niveles. Una hipótesis relacionada es que “todo lo que uno tiene que hacer para lograr un mayor promedio es jugar más, practicar más, ¡NO ES CIERTO!
La importancia del aspecto mental de su juego aumenta como aumenta su nivel de habilidad. Con mayor precisión, para aumentar su promedio es necesario saber mucho más acerca del boliche: selección del equipo, el ángulo y los ajustes para liberar, basarse en la matemática para realizar tiros de chuza y derribar pinos sueltos, sistemas de ataque, de ajuste, etc. El boliche de promedio alto es, definitivamente, mucho más de lo que representa un juego físico que se limita a rodar la bola por la mesa. Un buen boliche siempre ha sido más un juego mental que un juego físico. Sin embargo, ha sido percibido como un juego con muy poco contenido mental o intelectual.Tal vez esta imagen del juego ha sido creada por aquellos que promueven los bolos como un juego fácil que cualquier persona puede realizar, como rodar una pelota por la mesa, y cualquiera puede lograr un juego de serie alta (más por suerte que por habilidad). No cualquiera puede hacerlo bien, sobre una base constante, a menos que el o ella, tengan un buen juego mental. La distinción debe hacerse entre rodar una pelota por la mesa y un buen centro de boliche, hay una gran diferencia. Aunque en el sentido estricto de la palabra bolos es igual, el jugador de alto nivel se distingue por su buen juego, mientras que el otro no es mas que alguien que simplemente rueda una bola.
Consistentemente, los buenos jugadores tienen un juego mental bien desarrollado. En realidad hay dos partes distintas del juego mental. Una se refiere a las decisiones conscientes que tiene que hacer cada vez que juega. La otra se refiere al estado emocional de su mente.
Algunas de las decisiones conscientes que forman parte del juego mental incluyen: ¿Que equipo se debe utilizar en función de la superficie de la mesa, el equilibrio y el rodado de la bola? ¿Qué ángulo o punto de rompimiento funcionará mejor en las mesas y cuál será el tiempo justo? ¿Cómo va a interaccionar la bola con la mesa? ¿Con qué ángulo deberá ajustarse la aproximación y el soltado para lograr un buen resultado? ¿Existe alguna condición inusual en la mesa que haya que tomar en cuenta? ¿Cuál es la posición y referencia en la mesa que va a usar para convertir los spares? Estas son solo algunas de las decisiones conscientes que tiene que hacer, y hacerlas bien, si quiere lograr un alto promedio.
En el lado emocional del juego mental hay factores como la capacidad de controlar su temperamento, manejar la presión y las situaciones de tensión, relajarse, concentrarse, aceptar victorias y derrotas, mantener una actitud positiva, etc. Todos estos factores emocionales pueden entrar en juego mientras practica boliche, y todo ello afectará su éxito en las mesas.
Hay un “equilibrio” físico en el momento en que usted libera la bola. También hay un equilibrio mental que es necesario durante su juego. Si su cuerpo está en perfecto equilibrio y su mente también está en equilibrio, su juego será tan perfecto como puede ser.